Su promesa, a escala mayor, es ayudar a vincular el mundo de la computación digital al mundo físico, como nunca antes. La recompensa sería que los medición más enriquecidas de datos, más inteligencia y mayores niveles de optimización para todo tipo de campos - como la energía, la gestión del tráfico, la distribución de alimentos y atención de la salud. Muchas compañías están trabajando en las partes de esta visión ampliada, y la campaña de publicidad "Smarter Planet" de I.B.M. es probablemente la más clara la articulación de la visión.
Royal Dutch Shell y Hewlett-Packard están anunciando el lunes un paso hacia el uso generalizado de la tecnología de sensores de siguiente generación. La aplicación - la exploración de campos petroleros y de gas - apunta hacia las ganancias potenciales derivadas de los sistemas avanzados de detección.
No hay cifra en dólares sobre el valor acuerdo por varios años, y Shell no está diciendo cuándo tiene la intención de probar esta alta tecnología de prospección. Pero la compañía petrolera dice que la recopilación de datos sísmicos mucho más detallados y su análisis deben ayudar a identificar nuevos campos de petróleo y gas en zonas difíciles, como en formaciones de sal en el Oriente Medio y bolsillos de gas natural en América del Norte.
Los sensores son sólo una herramienta entre el conjunto de tecnologías que se necesitan en gran número de industrias. Para hacer que los complejos sistemas físicos sean más inteligentes también se requiere de avances en almacenamiento, redes, minería de datos y software de análisis. Sin embargo, los sensores son la medida fundamental, la recolección de datos y tecnología de las comunicaciones en el mundo físico - los ojos digitales, las orejas y la nariz hacia fuera allí. Los sensores pueden ser un ingrediente, pero es uno de los esenciales - al igual que el microprocesador no puede ser todo en informática, pero es la puerta de entrada de tecnología que hace todo lo posible.
En la prospección sísmica para el petróleo, grandes "camiones Thumper" golpean la tierra para producir ondas de sonido superficiales que los sensores de suelo, pueden entonces monitorear. Hoy en día, de 10.000 a 20.000 sensores, conectados por cables, pueden estar distribuidos en una superficie de 25 millas por 25 millas. Con el sistema de detección de Shell-H.P., cientos de miles, hasta un millón, de sensores inalámbricos - cerca de 3 pulgadas por 4 pulgadas - se puede distribuir en un área similar. Cada sensor, escuchando los ecos subterráneos sísmicos, es un canal de datos.
"Si usted puede aumentar el número de canales de datos, es capaz de escuchar mejor", explica Wim Walk, un científico geofísicos de Shell.
Cientos de veces más datos se generan con el nuevo sistema. Los datos brutos se recogerán, extraerán y analizarán para crear imágenes de las formaciones geológicas y del petróleo se encuentran en lo profundo de la Tierra.
Usando la nueva tecnología, dicen los científicos, se abre la puerta a nuevos niveles de claridad - como en la diferencia entre ver "Avatar" en 3-D o una pantalla de cine en regular.
Los beneficios, el Sr. Walk dice, debería ser más eficiencia en la producción de petróleo, con pozos secos y menos daños al medio ambiente reduciendo la perforación.
Los recientes avances en sensores, redes, almacenamiento y software, dice Jeff Wacker, un funcionario de HP en el grupo de servicios de la empresa, han hecho que la alianza Shell HP sea viable. "No podríamos haber hecho esto hace unos años," dijo el Sr. Wacker. "Esto representa un sistema de tecnologías que llegan simultáneamente."
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