Costa Rica admira arte y urbanismo de Medellín

ORIGINAL: El Tiempo
Por: MANUELA SALDARRIAGA H. |
03 de Febrero del 2014

El costarricense Sergio Nuñez visitó Medellín en búsqueda de alianzas culturales. Foto: JOHAN LÓPEZ / EL TIEMPO

Director de cultura y turismo de la capital del cantón de Mora, vino en búsqueda de intercambios.

Ciudad Colón es la cabecera municipal del cantón de Mora ubicado en la provincia de San José de Costa Rica.

Con cerca de 15.000 habitantes y rodeada de playas volcánicas y de selvas en las que se protege el legado indígena, como la reserva Quitirrisí y los Cerros de Escazú, es uno de los emplazamientos del país centroamericano donde lo que más importa es el desarrollo comunitario a través del arte.

Sin embargo, cada vez experimenta con mayor fuerza la transición de dejar de ser una zona rural para convertirse en una urbana.

De ahí que para Sergio Núñez González, director de cultura y turismo de Ciudad Colón, Medellín sea un foco de atención por sus cambios vertiginosos y proyecciones de infraestructura que vinculan a los ciudadanos.

EL TIEMPO habló con él.

¿Por qué Medellín resultó ser interesante y no otra ciudad?
Tengo que decir que Medellín es un foco de interés para muchos países, no solo para Costa Rica.

El alcalde, Gilberto Monge Pizarro, llegó sorprendido luego de haber visitado Medellín, precisamente porque le pareció una ciudad que invierte muchísimo en cultura y en transformaciones urbanas y lo que nosotros estamos buscando es eso. De esta forma mi propósito es observar para tener buenos ejemplos.

De lo que ha observado, ¿qué lo ha sorprendido?
El desarrollo que están viviendo los barrios populares particularmente. Por ejemplo las bibliotecas, que son intervenciones muy grandes y, al conversar con gente alrededor de ellas, con chicos, sobre todo, resulta muy admirable el interés que tienen hacia estas obras y el sentido de apropiación, que es muy espontáneo.

Sin embargo Ciudad Colón es bastante cultural...
Sí, pero Medellín tiene un movimiento económico increíble que, a diferencia de otras ciudades, acompaña el lado social. Quiero decir que van de la mano y eso es lo que nos llama la atención.

¿Están interesados en intercambios artísticos?
Claro que sí. Pasantías, prácticas y capacitaciones. Queremos tener la posibilidad de que hayan intercambios bilaterales en música sinfónica y folclórica, danza, teatro, arte circense.

El propósito es ir abriendo puertas con diferentes instituciones.

Por ejemplo ya hay un convenio que tenemos listo con la Casa de la Cultura del Carmen de Viboral (oriente antioqueño).

Del mismo modo conversamos con una entidad independiente, que es la productora Merlín, porque estamos muy interesados que en Ciudad Colón conozcan a artistas como Maite Hontelé, Puerto Candelaria, La República, entre otros grupos menores.

¿Cómo es la participación pública y cómo la privada en el desarrollo de la cultura de Ciudad Colón? Tenemos un gran apoyo de la alcaldía, pero es una figura que para tener el apoyo de otros ministerios necesita de la participación privada. Creamos entonces la Asociación de Arquitectura, Rescate Histórico y Cultura, entidad que cuenta con apoyo y patrocinio empresarial.

Tal vez tengamos absorbidas a las empresas, a lo mejor, pero ellos creen muchísimo en esto. Tenemos un ingreso del Ministerio de Educación de apoyo a nuestra asociación por la ley gubernamental, que es el de un 2 por ciento anual, aproximadamente unos 3.000 dólares para proyectos de tipo inmobiliario, instrumentos.

Además de la ley de Dirección Nacional de Desarrollo a las Comunidades (Dinadeco)

Cantón de Mora es reconocido por ser uno de los territorios más pacíficos de Costa Rica, ¿le atribuye esto a la cultura? Hicimos un bulevar en medio de los tres edificios patrimoniales: la casa de la cultura, que tiene 80 años, el mercado viejo y el teatro.

Los tres están en un conjunto histórico y lo bueno es que es en el centro de la ciudad. El espacio cultural ha despertado el interés de todo el mundo por participar.

Tenemos otro edificio donde hay una casa de la juventud. Allí el fuerte es la parte tecnológica pero a muy buen nivel. Desarrollan un proyecto que se llama Tupahue, que existen como 80 en todo el mundo, y están dirigidos a niños de escasos recursos y adolescentes de 12 a 18 años que deseen aprender a hacer sus propios softwares de edición de video y de música de acuerdo con sus intereses.

También tienen grupos en proyección académica, semilleros, grupos de estudio. Indudablemente los jóvenes tienen en qué ocuparse.

¿Qué podría aprender Medellín de Ciudad Colón? Tenemos seis festivales durante todo el año. Nos concentramos fundamentalmente en visibilizar el trabajo de los jóvenes que se vinculan con la cultura, tenemos 500 alumnos en todas las artes con programas establecidos por el Ministerio de Educación para que saquen un título técnico y puedan entrar a una universidad.

MANUELA SALDARRIAGA H.
Para EL TIEMPO

Comments